El martes 13, los asistentes al ciclo de cine bélico ruso podrán programar la película de su preferencia entre las siguientes alternativas:(a) “La balada del bombardero” (The Bomber – 2011) con una duración de 181 minutos, dirigida por Vitaliy Vorobiov y (b) “Estrella. Señal de Socorro” (The Star – 2002) de 97 minutos, dirigida por Nikolay Lebedev. Sala Mafalda Mora a las 19:00 horas.
La balada del bombardero (The Bomber – 2011)
181 minutos. Director: Vitaly Vorobiov. Originalmente una serie de TV compuesta por 8 capítulos, esta versión para cine que tiene dos años de antigüedad es la propuesta más actual del ciclo que se presenta en la casa del arte Diego Rivera. Se desarrolla en Verano de 1943. La inteligencia militar soviética descubre que los alemanes planean instalar cerca del frente rampas del cohete V-2 para lanzarlos contra Moscú.
A fin de destruirlos, la Fuerza Aérea soviética planea una incursión de bombarderos liderados por el valiente capitán Andrey Gritsov. Sin embargo, antes de alcanzar su objetivo, el escuadrón de Gritsov es destruido por la defensa antiaérea alemana, y su avión cae derribado tras las líneas enemigas, si bien Gritsov y su amada Katia, que viajaba en el avión como operadora de radio, consiguen sobrevivir.
Cuando Gritsov es capturado por los alemanes, intentará escapar para volver a reunirse con Katia y regresar a las líneas rusas.
Trailer
Película completa en francés: Parte 1ª – Parte 2ª
Estrella. Señal de Socorro (The Star – 2002)
Duración: 97 minutos. Director: Nikolay Lebedev. Remake de un clásico ruso del año 1949, este relato narra las vicisitudes de un variado grupo de exploradores de diversas edades y nacionalidades rusas debe internase tras las líneas alemanas y entregar mediante mensajes radiales, información de inteligencia a su mando para prepararse frente a los incesantes y poderosos ataques germanos.
El variopinto grupo de exploradores, la cuadrilla de nombre en código “Estrella” es buscado por todas las tropas alemanas, cuya inteligencia les ha llamado “los demonios verdes” por su facilidad para mimetizarse con la espesura de los bosques y el invisible daño causado a sus operaciones.
Ignorados por la versión de Estado de largos años, los ahora oficialmente reconocidos como héroes de guerra dejan en claro que el sino de los exploradores siempre es trágico: no pueden caer vivos en manos del enemigo. Su comunicación debe limitarse sólo a transmitir sus hallazgos a su estación base “tierra”, donde se generan no sólo expectativas en el mando militar si no en los afectos de la radiopoeradora.
El ciclo de cine bélico ruso finaliza el miércoles 14 con la exhibición de la galardonada película “El ladrón”. La cita es a las 19.00 hrs en la sala Mafalda Mora de la Casa del Arte Diego Rivera.