Tras ser acusado de ser “antisemita” y en la creencia de que buscar en los propios defectos ayuda a crecer, el director israelí Yoav Shamir inició una aventura que dio como resultado la cinta “Defamation” (Israel, 2009), un ácido y provocador periplo sobre lo que hoy se considera “antisemita” y que se exhibe en el Ciclo de Cine Palestino el martes a las 19 horas en la Sala Mafalda Mora de la Casa del Arte Diego Rivera. Entrada liberada.
Organizado por la Corporación Cultural y por la Federación Palestina en Chile, la película (con una serie de premios internacionales) tiene su origen en las acusaciones vertidas sobre el propio Shamir -por parte de un periodista- de ser “antisemita” tras cuestionar la política de su país hacia el pueblo palestino en su película “Checkpoint” (Israel, 2003).
Fue entonces cuando empezó a tomar nota de la importancia del tema en la vida cotidiana de su país donde, casi no pasa un solo día sin que los medios locales publiquen un artículo sobre el nazismo, el Holocausto o directamente sobre el antisemitismo.
EL VALOR DE LA TOLERANCIA
¿Qué es el antisemitismo hoy, dos generaciones después del Holocausto? Yoav Shamir viaja por todo el mundo en busca de nuevas manifestaciones del “viejo odio” y encuentra respuestas alarmantes.
En esta búsqueda, Shamir acompaña a dirigentes norteamericanos judíos en su visita a distintas capitales de Europa para advertir a las autoridades gubernamentales de la creciente amenaza del antisemitismo y se suma a escolares israelíes en su viaje de estudios a Auschwitz.
La película cuestiona las percepciones y terminologías cuando algunas ideas pueden consideradas por algunos como antisemitas y por otros como un acto de crítica legítima contra las políticas de Israel.
La obra lidia entre el antisionismo, que rechaza la noción de un Estado Judío; y antisemitismo, que rechaza a los judíos. ¿Será que el primero se usa para ocultar el segundo? ¿Existe una diferencia entre el antisemitismo de hoy y un abierto racismo que afecta a todas las minorías?
Un interesante ejercicio –valiente por lo demás- imperdible este verano.