Una experiencia emocionalmente fuerte para quienes hicieron su vida en la localidad de Chaitén fue ver su pueblo retratado y destruido en el film argentino “Refugiados en su tierra” que mostró los procesos de cambios físicos derivados de la erupción del volcán homónimo en 2008 y que generó el traslado de miles de personas a otros puntos del país.
Lágrimas y comentarios apagados acompañaron las imágenes de la cinta que tuvo la presencia de los directores que viajaron especialmente para la muestra y que sumó un marco de unas 70 personas en la Sala Mafalda Mora de la Casa del Arte Diego Rivera.
El documental, de 2013, trajo los recuerdos de los momentos más difíciles que debieron superar en sus vidas los antiguos habitantes, quienes vieron derrumbarse amistades, sueños y el trabajo de generaciones.
RESEÑA
Bajo la dirección de Fernando Molina y Nicolás Bietti, la producción de 96 minutos fue filmada en Chaitén y cuenta la vida de un grupo de personas que regresa a su pueblo, tras la erupción del volcán, para impedir que las autoridades abandonen el lugar.
Allí se encuentran con un escenario desolador, el río se ha desbordado y muchas casas han desaparecido por completo. Los años pasan y el veredicto final sobre el futuro del pueblo no llega.
El tiempo parece haberse detenido. Ahora viven entre las cenizas, sumidos en el abandono y perseguidos por el Estado, buscando defender su identidad. La película es un retrato intimista del hombre y su pertenencia, una lucha interior forjada por las fuerzas naturales.