La identidad de Chiloé a través de su imaginario religioso llega este jueves con la muestra “Procesión” del artista Guillermo Grez

Desde las Misiones Circulares que iniciaron los jesuitas en 1608 en la Isla Grande de Chiloé, tolerando de paso costumbres de los pueblos originarios, surge la identidad del isleño fuertemente influenciada por la religiosidad y que recoge en su sincretismo la exposición “Procesión” del artista Guillermo Grez, que será inaugurada este jueves a las 19 horas en la Sala Pinacoteca de la Casa del Arte Diego Rivera. Entrada liberada.

Con el apoyo de la Corporación Cultural de Puerto Montt, la muestra busca recoger en principio la belleza y energía cultural que Chiloé ofrece a quien llega a visitarla o habitarla, algo que Guillermo Grez reconoce como fuente de inspiración y seducción desde que llegó a vivir al territorio, hace más de 30 años.

La religiosidad de los chilotes está reflejada en sus iglesias sectoriales que datan del siglo XVIII y XIX construidas en maderas nobles como alerce y ciprés, de las cuales 16, por su valor arquitectónico, han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

CHILOÉ: BELLEZA BARROCA

“Esta muestra es parte de una retribución que hago a la isla, por todo lo que ha significado para mi vida y mi trabajo. Este sustrato que en cada capa guarda y deposita imaginarios, realidades, mitos y naturaleza y que pareciera no agotarse y sobrepasar la conciencia del individuo”, dijo el artista.

Un trabajo de rescate de la identidad que ratos -opinó- sucumbe al cambio y la modernidad, aun cuando mantiene la exaltación de los paisajes barrocos de la naturaleza,  de sus costumbres, idearios y sobre todo de la religiosidad y su arquitectura, verdadero cofre de la identidad isleña y donde se refugia y encuentra el alma de Chiloé.

Una muestra que estará abierta hasta el 14 abril y que, en palabras del artista, es a la vez estética e historia y emoción y proyecto.