El contrapunto de dos vidas, una cargada de traumas por la violencia diaria y otra en la búsqueda de las raíces, es la trama que desarrolla la película “La Sal de este Mar” (Palestina-Bélgica-Francia-España-Suiza, 2008) que se exhibe este miércoles a las 19 horas en la Sala Mafalda Mora de la Casa del Arte Diego Rivera. Entrada liberada.
Organizado por la Corporación Cultural de Puerto Montt y la Federación Palestina en Chile, el ciclo busca comprender la historia, los dramas íntimos, la brutalidad cotidiana, la resistencia al ocupante y el futuro entre los palestinos y los israelíes.
La película “La Sal de este Mar” narra la historia de dos palestinos, Soraya y Emad, con vidas completamente distintas pero que tienen en común un sentimiento de marginalidad, que se conocen en Palestina en el momento en que uno (Soraya) desea quedarse y el otro huir (Emad). Soraya tiene veintiocho años. Nació y se educó en Brooklyn, pero ha decidido regresar a Palestina, país del que su familia tuvo que exiliarse en 1948.
Desde su llegada a Ramallah, intenta recuperar el dinero de sus abuelos. Por su parte Emad, nacido en los territorios palestinos, ha conocido toda su vida la ocupación y la realidad palestina, y tiene como máximo sueño obtener un visado para ir a estudiar a Canadá y marcharse de allí.