Los rasgos del paisaje de un país, mostrados a través de trazos y colores aplicados –con técnica exquisita- a la acuarela, surgen como evidencia para conocer la raigambre del sur de Chile a través de la colección “De Mar a Cordillera” que el pintor Mario Barrientos inauguró en el Foyer del Hotel Casino Dreams de Puerto Varas, muestra que estará abierta hasta el 17 de agosto.
La muestra de 25 pinturas –que significó dos años de trabajo en taller- inicia así una itinerancia por varias ciudades del país, luego que fuera exhibida en la Casa del Arte Diego Rivera en abril pasado, sumando más de 3 mil visitas en 20 días de exposición en Puerto Montt y con destacada crítica de la prensa local, nacional y especializada.
Considerado uno de los mejores acuarelistas del país, Mario Barrientos ha sumado premios a través de sus 52 años de carrera, con un talento que se exhibe en muestras o colecciones privadas de Chile, Argentina, Australia, Noruega, Brasil, Bélgica, Francia, Italia, Estados Unidos, España, Japón y Holanda.
MARIO BARRIENTOS: PINTURA CONCIENTE
Nacido en Isla Huar, Barrientos fue recogiendo imágenes desde temprana edad a lomo de caballo junto a su abuelo, el profesor normalista José Barrientos. Poco a poco fue plasmando una geografía natural y humana que alimenta su inspiración desde 1962 cuando, a los 17 años, desarrolló su primera exhibición pública en Puerto Montt.
Compañero de espacios y conversaciones con Manoly, Gastón Gómez (fundadores de la escuela pictórica de Puerto Montt) y Ricardo Anwandter (de Valdivia) tuvo al igual que aquellos una pasión por la acuarela y por los paisajes del litoral sureño, aunque tempranamente estableció un carácter personal para su obra, agregando un fuerte componente humano al paisaje.
Miembro de una camada de pintores que prosiguieron el camino instalado por Pacheco Altamirano o Hardy Wistuba, conforma la denominada Generación Conciente, ligada a los sentimientos y realidad –a veces abrumadora- de Angelmó, la costa, el mundo rural o el paisaje del archipiélago austral.